Hace escasos días, un “señor” comentaba tan alegremente que la persona de la foto, el científico Bernat Soria, “ni era investigador ni nada”, semejante despropósito sólo podía provenir de uno de los personajes del núcleo duro del PPCV (aunque tampoco me extrañaría oírselo a ese ex-presidente al que se le está cayendo el bigote de tanto decir mentiras o a cierto ex-ministro de trabajo siempre muy engominado). Y es que una cosa es querer ganar las elecciones y otra muy distinta hacerlo de una manera tan baja y mezquina como es atacando a los adversarios con falacias del calibre al que hago referencia.
El respeto hacia las personas y su labor brilla por su ausencia en las actuaciones de la derecha española. Estos señores deberían echarle un vistazo al currículum del actual Ministro de Sanidad y se quedarían ampliamente sorprendidos. ¡Y sólo por la existencia de un lugar llamado Singapur que seguro desconocen!
Bernat Soria ha impulsado, como gran conocedor que es de la materia, la Sanidad española con planes tan necesarios como las ayudas para los celiacos o la salud bucodental gratuita para la infancia.
Y ahora encabeza la excelente candidatura del PSOE al Congreso por la provincia de Alicanta, junto a personas como Leire Pajín, Juana Serna o Carlos González, todos ellos personas trabajadoras que dan lo mejor de sí por los ciudadanos españoles y del resto del mundo.
El dueto formado por el PPCV y el Opues Dei está creando una realidad paralela en torno a la realidad valenciana. Ayer llegaron a decir que ¡querían para España un Gobierno como el de Torrevieja! Eso demuestra que la realidad de la situación local les es completamente desconocida, porque más allá del funesto Pascual Flores o del derrochador Premio de Novela se esconden carencias básicas en casi todas las materias. Amén de otras cuestiones sí conocidas por todos como las constantes corruptelas y otras oscuras historias.
Yo sólo espero que el próximo Gobierno del Estado Español no se parezca en nada al Consistorio torrevejense y que siga siendo un ejemplo en cuanto al avance social, en la defensa de los más necesitados y que afronte los nuevos retos con las fuerzas con que afrontó los pasados.
Y si le da algún que otro “palo” a la Iglesia seré completamente feliz.